Quizás usted piense ¿que tiene que ver lo que piense, o bien, las ideas que hay en mi mente, con alcanzar el éxito en aquello por lo que trabajo día a día? Pues bien, tiene mucho que ver, incluso hasta algún punto pueden llegar a ser la misma cosa. Por ejemplo, alguien comienza un negocio, con mucho temor por cierto ya que el mercado se ve riesgoso y piensa que probablemente fracasará y perderá su dinero. Considerando esto, lo recomendable es que venda todo y trate de rescatar el dinero invertido en el negocio ya que lo mas probable es que fracasará. Otro ejemplo: una pareja decide casarse, pensando que probarán suerte ya que muchos de sus conocidos se han casado y tiempo después terminan divorciándose, argumentando que hoy en día el matrimonio no funciona. Si esta pareja se casa pensando así, esperarán cualquier situación adversa para decir: "es verdad, no funciona, debemos separarnos".
Aunque parezca radical, todo hecho en nuestra vida comienza con una idea. Usted pensó en levantarse hoy en la mañana, y lo hizo. Pensó comer, y lo hizo. Pensó en conquistar a aquella dama, y lo hizo.
Cualquier avance tecnológico o científico en cualquier época ha comenzado con una idea o un pensamiento. Incluso según el relato Bíblico, Dios al crear la tierra concibió la idea declarándola con palabras que decían lo que había de hacer antes de que estas se materializaran.
Considerando esto les pregunto: ¿estamos considerando conscientemente los que ocurre con nuestros pensamientos? incluso si no te parece que esto sea cierto ¿haz considerado detenerte a analizar en que piensas cada vez que realizas una actividad y que resultado obtienes finalmente? ¿O pones piloto automático y dejas a tu mente deambular mientras solo vives el día a día aceptando lo que viene simplemente?
Bueno, esto es un pequeño secreto, y es que si podemos cambiar los resultados y obtener una vida mas feliz y mas satisfactoria...el asunto es saber si realmente lo deseas.
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