Pensamientos que sabotean nuestro éxito.

Todas las personas deben lidiar en algún momento con sus "fantasmas" o "piedras de tropiezo", trabas en ciertas áreas de su vida que no les permiten avanzar ni crecer, muchas veces incluso son motivo de estancamiento, no hablaremos de ningún factor externo que nos afecte, sino de los más complejos que son aquellos que ocurren en nuestra mente. Los expertos les llaman "paradigmas", y la definición más sencilla se refiere a "la aceptación de una idea". Por ejemplo, cuando un jovencito se enamora de una señorita y sueña con poder hablar algún día con ella para decirle lo que siente, pero piensa que ella lo rechazará, que no está a su altura y que intentarlo será un rotundo fracaso y solo le queda sufrir por ella. A pesar de desearlo de verdad, se repite tantas veces las razones del por que no, que finalmente termina aceptando esta idea negativa como una verdad absoluta, sin siquiera haberlo intentado alguna vez. Seguro le a pasado que cuando le sugiere una idea a un amigo con el fin de que este progrese, él le responde con una montaña de objeción que van desde los argumentos mas ridículos hasta los más elaborados que denotan que ha pasado más tiempo pensando como fracasará que tomando real acción. Así también sucede con aquella persona que desea un mejor trabajo, una mejor relación, una mejor salud, etc. La mayoría de estas ideas ni siquiera tienen un fundamento sólido, solo comenzaron como suposiciones.

Ahora bien, si lo analizamos nos damos cuenta que la respuesta al porqué de nuestras frustaciones y fracasos no debería estar necesariamente en nuestro entorno sino dentro de nosotros mismo. Es decir, quizás el análisis de nuestra forma de pensar, un análisis no superficial sino mas profundo, no daría luces acerca de la razón real del porque tememos a dar ese paso que tanto deseamos dar. Es irónico ver como ante nuestro más puros ideales, son nuestros propios pensamientos o "paradigmas" los que nos frenan y nos estancan. El mismo apóstol Pablo dice "pues no hago lo que quiero, sino aquello que no quiero eso hago", haciendo una analogía acerca de lo que sucede en nuestra mente objetiva versus nuestro interior espitirual.

Seguro te preguntarás ¿cómo puedo hacer para cambiar esta realidad en mi mente? y para responder a esta pregunta me gustaría citar a Charles Haanel, en su libro "The Master Key system" (El Sistema de La Llave Maestra), nos habla acerca de la interiorización que es un método que tiene como finalidad llegar mas allá de lo superficial, internarse en la esencia de nuestro pensamiento, lograr comprender que es lo que nuestro subconsciente nos dice realmente y si esta de acuerdo con lo que nosotros concientemente queremos lograr. Por ejemplo, concientemente te dices a ti mismo "yo deseo ganar mas dinero", pero si interiorizamos quizás tu subconsciente está diciendo "no te lo mereces", "si ganas esa cantidad no podrás manejarlo, lo perderás" y caemos en el paradigma nuevamente, porque continuas poniéndote en una situación que no existe, que solo está en tu mente postergando tu éxito.

Probablemente si buscamos interiorizar en nuestros reales pensamientos para encontrar estas respuestas nos cueste un poco ya que acostumbramos a ser condescendientes con nosotros mismos, para acelerar el proceso puedes también pedirle a algún amigo o algún asesor que te guíe y te haga las preguntas adecuadas para llegar a la verdad.